Mujer de selva y mar, de días claroscuros,
contemplo el esplendor del bosque de
tu ser,
me dejas el destello de tu pasar osado
y quedo ensimismada, nutrida de tu
luz.
Mujer de grito erguido con hambre de
justicia,
que riegas en el campo semilla de bondad.
Mujer de mil batallas, de llantos y
alegrías,
que caes , te levantas , ejemplo de
triunfar.
Mujer que llevas gloria, precedes al amor,
que pares la ternura colgada de un
clavel,
se derrama en tu fuente la dulce
inspiración
de decirte que te amo, mi hermana
,Yeisabel.